martes, 19 de febrero de 2013

Suicidio emocional.

Tengo miedo. Miedo de tus silencios, de tus dudas, de tus miedos. De los finales, mis finales, nuestro final.
No tener la ventaja de saber qué pasa por tu mente. No tener la ventaja de poder adelantarme a cada silencio, a cada duda, a cada miedo. A los finales, a mis finales, a nuestro final.
Miedo a que se rompa. Que nos rompamos, que se rompa.
Callar es un suicidio emocional, y tu, tan suicida, callada, llena de dudas y miedos.
"Y yo tan vacío, impotente."
Me estás tapando los ojos con la venda más opaca y oscura que existe: La duda.
Que ya dudo de tus silencios, de tus dudas, de tus miedos, de los finales, de mis finales, de nuestro final. De lo que somos, y lo que seremos. Y puestos a dudar, duro de lo que fuimos.
"Confío tanto en ti que dejaré que me traiciones."
Y si me quitas la venda, si me confías tus pensamientos, esos miedos, (¿Tal vez miedo a romperte?) puede que pueda arreglarte antes de comenzar a quebrarte.

No hay comentarios:

Publicar un comentario